"Se acerca el fin de año; un buen momento para
hacer balance, para repasar qué has hecho, qué ha merecido la pena, en qué has
fracasado….Bien, cuando me he parado a pensar en esto, ha habido dos letras
importantes: RR… un día en verano, veo un video acerca de correr acompañado, un
grupo que invita a asistir a alguna clase...un 4 de septiembre...y allá que
fui. El primer día todo eran reencuentros, abrazos, risas….yo sola;
espectadora del buen ambiente, la
confianza, del nivel….¡qué aguante corriendo! A partir de ese día, mi reto ha
sido ir mejorando, y el grupo ayuda...MUCHO. En estos tres meses he sentido cómo mis compañeras, de una manera
o de otra, me animaban, y ampliaban mis fuerzas. Frases como: ¡claro que puedes!,
¡venga, pollito! Hay un perro, y Sofía en cabeza, ¡vamos, campeona!, ¡cómo vas
cogiendo posiciones! Quedan para hacer “tiradas” y yo decía: “a ver cuándo”
porque tampoco es plan de ir y retrasar la marcha de las demás. Escuchaba cómo
se preparaban para la media, los testimonios de compañeras que llevando muy
poco tiempo habían avanzado tanto...y sentía envidia...mis modelos a imitar.
(Diciembre ha sido un mes difícil..y ¡¡¡¡¡cuánto he echado de menos no poder ir
a entrenamientos ni tiradas!!!!!!!!)
La primera tirada en la que medianamente aguanté,
guiada por Lala, fue determinante. Decía ”llanita” y bueno….de todo menos
llanita; pero la sensación de acabar “casi” a la vez con ellas, me ayudó a
creer en mí. Ellas me animaron a la Carrera de las Aficiones. Una mala noche
con nervios, miedo de dormirme y no llegar, pero con muchas ganas. En años
pasados había corrido de manera puntual, participado en carreras, pero esta ha
sido la primera en la que consigo bajar de 60 minutos...un gran avance para mí.
¡Qué satisfacción!
Leo las crónicas de mis compañeras, de sus
primeros 10 km y me emociono… tenemos tanto en común…
Me encanta correr y no era consciente. No es ir
por libre, es cuidarnos, mirar para atrás, (cuando puedes), sin perder a las de
delante, es sacrificio, es solidaridad, es valentía, es no darse por vencido a
pesar de caídas, del cansancio porque ¡es tan gratificante! y este grupo es
quien me ha ayudado a descubrirlo, sentirme parte de esta familia también. Lo
que cada uno aporta no pasa desapercibido. Qué suerte he tenido encontrándoos.
Me siento privilegiada. El 2018 vendrá con nuevo retos, y a ellos nos
enfrentaremos con fuerza, con ilusión y con buen humor. Gracias, RR" - Sofía-
