A veces suceden "cosas" que solo se pueden explicar desde las emociones. Suelen nacer de la semilla escondida de una ilusión, la cual a veces la tenemos que rebuscar en lo más profundo de nosotros. Y cuando la encontramos y regamos con voluntad y esperanza , esas "cosas" florecen y ocupan todo nuestro espacio, todo nuestro tiempo.
Este domingo floreció en Barcelona y Roma dentro de Vanesa y María José, esta primera flor, este primer maratón.
Los que las hemos acompañado estos meses de entrenamiento hemos asistido a todo el proceso, a ese carrusel de sensaciones, felicidad, dudas, alegrías y también desesperanzas.
Éramos testigos, pero también protagonistas, porque sus sensaciones eran las nuestras, sus metas también nuestros destinos y todos juntos este domingo en el maratón de Barcelona y Roma, alcanzamos el final del camino de la mano, con el ánimo y el empuje de todos los compañeros que nos han ayudado a llegar.
El camino no termina aquí, solo remansa para continuar. Ahora toca curar el cuerpo y ordenar la mente, la reflexión y el abrazo de los compañeros.
Enhorabuena compañer@s y gracias por haber compartido este tramo de camino, de vida. Juntos es todo más fácil.
