¿Cómo ganar un canicross después de un maratón? Pues eso
digo yo. Este domingo habíamos
quedado tres Running Rivas para correr un canicross. El pronóstico del tiempo
no era bueno, pero como suele pasar, la predicción falla y la mañana no ha
podido ser mejor. El circuito todo un lujo por grandes avenidas llanas que
recorren las huertas de San Fernando.
Después de equiparnos los seis y calentar, nos colocamos
detrás del arco de salida. María está a una distancia prudente para que Yeicob
no pueda detectar a su amiga Lisa. Con el disparo salimos todos escopetados.
¡Vaya ritmo infernal! Intento no perder de vista a las chicas que van por
delante mi, pero mis piernas aún van a velocidad de maratón y no consigo
acelerar. A mitad de carrera veo que la tercera comienza a andar en algunos
tramos lo que nosotros aprovechamos para acortar distancia.
Cada vez estoy más
cerca de ella y de repente veo también a la segunda y primera chica. A un
kilómetro de la meta Yeicob reconoce el camino de vuelta y comienza a tirar.
Poco a poco voy remontando hasta alcanzar a la primera corredora y sigo
corriendo hacia la meta, no me atrevo mirar hacia atrás hasta cruzarla. Al poco rato también llegan Irene y María con Chester y Lisa que ya se han
aficionado a esto del canicross.
P.D.: Paco, te prometo que iba a ser solo un rodaje suave
para soltar, pero Yeicob comenzó a tirar y no le pude frenar.
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