10 Km de Laredo(historia de una obsesión)

 Esta historia no podía empezar de cualquier manera. La simple historia de fuí y corrí. ¡No!, Empezó la tarde del  viernes anterior a la prueba, en el vestuario del polideportivo, celebrando el cumpleaños de Paco, con unas botellas de champan por medio. Pepe tenía dorsal desde hace semanas para los 10 km de Laredo. Junto con Israel habían planeado correr la carrera más rápida de España, pero este último había caido lesionado en el partido que jugamos contra los MTB de Rivas y no la disputaría.

Pero retrocedamos  por un momento, un poco más atras de la historia. Cuando  Pepe recién entrado en el club le plantea a Paco el objetivo de correr la San Silvestre Internacional, donde hay que acreditar 38 minutos, en una carrera homologada de 10 Km. Empieza la preparación concienzuda y pronto se situa en los 40 minutos, está contento con la progresión. Junto al Aguilucho su compañero de fatigas, se apuntan a una carrera y a otra.

 El aguilucho logra el objetivo y en el 2011 corre la primera internacional, Pepe se queda a menos de un minuto para conseguir la marca. Pasan los meses y con mayor dedicación lo vuelve a intentar una y otra vez, pero el registro no acaba de llegar. Prueba en carreras de 5 km, medio maratón, crosses,... buscando sensaciones de velocidad, que nuncan llegan, incluso empieza a retroceder su marca personal.

Cuando llegabamos a la pista los lunes, todo el mundo le preguntamos..¿Que tiempo has hecho?, pero siempre era la misma respuesta, últimamente ya no nos ponía escusas. Todos los que le conocemos le dabamos algún consejo y muchos ánimos, aunque lo agradecía, a través de su mirada extraviada, denotabamos que su pensamiento, estaba repasando la última carrera. 

En el 2012 tampoco consigue marca para la San Silvestre I, talvez haya alcanzado su techo. A principios de 2013 cambia su objetivo por disputar el maratón de Madrid. .Empiezan las tiradas largas y las medias y casi por rutina de tiempos anteriores, cuando está corriendo un 18.000 se empieza a cronometrar kilómetros sueltos en tramos(un 3.000, un 6000) y observa que tiene la punta de velocidad y fuerza que ya no buscaba. 

Como estaba contando el champán corría en el vestuario, el Aguilucho se vino arriba con la segunda copa y le dijo a Pepe, que aunque llevaba dos semanas lesionado que tiraría de él los 5 primeros kilómetros. Israel le ofreció  su dorsal, para tan noble causa y a la mañana siguiente se encontraban los tres dirección Santander.

Salieron a ritmo tranquilo, sin arriesgar. Los dos habían corrido la prueba el año anterior y sabían que salir rápido como pedía el perfil sería un error que pagarían.Contra todo pronóstico pasaron  el km 8 poco más de 30´. Estaban por debajo de marca. El aguilucho le dijo que siguiera a ritmo, que lo tenía hecho y se fué a por su registro. Pepe apretó los dientes y no se conformó con seguir a ritmo, quería más. Y tanto, al final Pepe 36:46 casi dos minutos que su mejor marca y el Aguilucho 36:32 MMp.

Israel se comía las uñas viéndoles llegar, había viajado hasta Laredo para ayudarles, animarles y asistir en primera persona al "Milagro de Pepe". (Javi)